Una mujer inmigrante!!!

Hoy conmemorando el día internacional de la mujer, día donde se recuerda una tragedia que  abrió las puertas para  comenzar a tomarse en cuenta los derechos  de la mujer trabajadora.  Me entere que  de las 146 mujeres que murieron en esa fábrica (New York, 25 de Marzo de 1911) la mayoría eran jóvenes inmigrantes de origen judío e italiano.

Esta conmemoración causo en mí, que me montara en la máquina del tiempo y darme un gran paseo por  estos 8 años de inmigrante. Sé y conozco gente que lleva un montón de años más, pero   este post no se trata de cuantos años tenga fuera, sino todo lo que he vivido en todo este tiempo. Por eso  las dos grandes  preguntas: Cuanto he cambiado???  Cuanto he aprendido???  Ya les diré cuanto!!!!

Un día despertó en mi consciencia la necesidad de darles una doble nacionalidad a mis hijos,  de poderles dar la oportunidad de tener una alternativa más de desarrollo, al pasar el tiempo y conocer el hombre ideal para mí, el cual estaba segura de que quería envejecer junto a él, crecía mas en mí esta necesidad y ni les cuento la angustia que provoco en mí el saber que estaba embarazada y que ni esperanza de satisfacer esta necesidad.

Al comentarle esta idea a mi esposo  a medida que mi barriga iba creciendo,  no fue muy alentadora la respuesta que recibí,  ya que no me dijo “loca”, porque el respeto es grande, pero muy gentilmente me hizo saber que de Venezuela,  “no se iba, que va”!!!  Como el matrimonio o el vivir en pareja es cuestión de dos, y que definitivamente no existen obligaciones sino acuerdos, no me quedo de otra, que calmar mi necesidad.  L

Al nacer nuestro hijo y darnos cuenta que el sentido de responsabilidad y compromiso es grande, sumándole a que en nuestro paraíso “Venezuela”, se estaba comenzando a vivir un ambiente  totalmente nuevo, de  odio, la falta de respeto hacia el otro, la poca tolerancia, y bueno, un sin fin de cosas que provocó un impacto en todos los ámbitos,   nos vimos obligados a tomar la gran determinación de decir; nos vamos!!! 

Que sensación tan horrible al montarme en ese avión, tantos sentimientos encontrados, tantas incertidumbres, que pesada se hace la maleta, con todo estos sentimientos que te llevas, tantos recuerdos, te puedo decir que después de 8 años, todavía tengo muy fresco en mi mente, el rostro de mis padres al despedirme, el de mi hermano al acompañarme al aeropuerto, y no te miento es un sabor más que dulce, es agrió, en todo momento. Como te pesa las piernas cada paso que das para montarte en el avión y despegar en busca de tus nuevos horizontes.

Pero por otro lado la consciencia junto con la necesidad me gritaban, esto es lo que se debe hacer, ahora! A velar por un nuevo bienestar para tu hijo!!!… Ya fuiste hija…Ahora te toca ser madre, les digo con el corazón en la mano,  no es fácil!!!  Si eres una persona que amas tu comodidad,  que te sientes bien contigo misma y con  tu sentido de responsabilidad hacia tus hijos, sí no tienes ese motor que impulse tal acción, mi humilde opinión seria que ni lo intentaras, no hagas nada de lo que no quieras, que no te nazca, obligado ni a la esquina y mucho menos para complacer a alguien, sobre todo sí esa complacencia es acosta de tus sacrificios.

Como cada historia es distinta, la mía fue; que al llegar al USA, el impacto de ese choque emocional fue grandísimo!!! Me sentía como pajarito en grama, pasé de ser   una persona extrovertida a una totalmente introvertida,  mientras que tuve el pasaje abierto por seis meses, siempre amenazaba a mi esposo que me iba a devolver (como muchachita chiquita, que amenaza con irse de la casa, hasta cuando te dice tu mamá o papá; “Ok, te quieres ir??? Vamos que te ayudo a empacar!!! ) Tal cual fue así, no me quede quieta hasta, que mi pobre esposo cansado de la misma cantaleta, me dijo: Te quieres ir??? No hay problema yo te llevo al aeropuerto. Plop!!! Como Condorito jajjaja y dije; "como que calladita me veo más bonita nop"?

No sé, si fue la poca organización y el poco tiempo que tuvimos, para armar el viaje, estudiar los pro y contra, de cual sería nuestro plan para alcanzar nuestro objetivo, pero, créanme la razón de nuestro gran sacrificio,  después de 6 años termino en un gran fracaso!!! Y aquí viene mi primera respuesta a la gran pregunta: Cuanto he cambiado???

Después de ver me una mujer totalmente independiente y no me refiero a la independencia monetaria, sino que nunca espere ayuda de nadie para alcázar mis metas,  siempre fui decidida y sin temor a lo que viniera, sabía que pa’lante era para allá y salgan sapo o ranas, tenía que ser para allá, pa’lante.  Pasé a ser una mujer súper dependiente de mi esposo (parecía muda jajjaja) ya que nunca me decidí hablar el idioma, nunca pase de la primera fase del proceso de adaptación, “sabes esa de la que es romper el hielo e integrarse cuando uno llega a un lugar nuevo”.   Nunca me cayó el 20, como dirían mis buenos amigos mexicanos. Se escondió, mi otro yo, que me dijera; Hello!!! Tú eres la que estas llegando, tú eres la que tienes que integrante, tú eres la que tienes que aprender hablar el nuevo idioma…Y por esos 6 años se quedó una nueva yo, “introvertida” Que  la quería? No la quería. Que me sentía cómoda siendo así? Para nada!!! No existía un día que decía esta... no soy yo!!!  

Un poco harta!!! de vivir una vida que no quería, de haber perdido la razón por la cual tanto sacrificio, conocer cada día a personas que en ves de aportarte y dejarte, más bien te quitaban,  en pocas palabras desencantada y frustrada L  

Llego a mí una situación que para ese momento era un perfecto desastre!!!  Yo loca porque me botarán de mi trabajo…Adivinen a quién despidieron de su trabajo??? A mi esposo… Qué??? Esa fue mi reacción cuando en horas de almuerzo me da esa noticia, (sí sentía que me estaba hundiendo, pues con esto toque totalmente fondo) ya que ese mismo día en la mañana me había hecho una prueba de embarazo y el resultado fue “POSITIVO”.  La que estaba loca por dejar de trabajar en ese lugar era yo!!! El que amaba su trabajo era él!!!  La que trabajaba para los chiclets y refresco, era yo!!! Y ahora qué???

Aquí viene la respuesta de mi segunda gran pregunta: Cuanto he aprendido??? Y sí definitivamente toda situación deja un mensaje, pero son las situaciones donde te ves perdida, donde tienes que tocar fondo para que el impulso sea con más fuerza. Esta situación me devolvió las ganas de luchar, de recuperar mi objetivo,  ya que Dios nos había regalado un motor extra, que ya no éramos 3 sino íbamos a ser 4… Que todos en la cama o todos en el suelo… Ya que no me parecía justo tener un hijo con mas ventaja que el otro,  que ninguno de mis hijos eran responsables de nuestras acciones como padres, así que a esta situación, tendríamos que encontrarle una solución!!!  “Justa para todos”.

Y así fue como en 4 meses nos estábamos  embarcando de nuevo… A buscar nuevos horizontes… Sí!! A mudarnos a otro País!!!  Por qué no Venezuela?  Porque cuando salimos de Venezuela se estaba comenzando a vivir un cambio total en todos los ámbitos, te podrás imaginar 6 años después… Tal cual como un niño… (Imagínate un niño que dejas de ver hace 6 años???)   wowww cuánto ha crecido!!! Así veíamos a Venezuela!!!  Por tal razón para nosotros  definitivamente no era opción, así que next stop!!!  “CANADA”

Sip, otra vez a empezar de nuevo, pero ya es más fácil,  no hay tantos apegos, y sí ya lo intentaste una vez, por qué no otra vez? Ya tienes  punto a  favor que son las experiencias, los errores cometidos, las caídas… Sin pensarlo mucho, abrimos alas, alzamos vuelo y allí vamos!!! J

A dos años de estar aquí, como te lo explico??! La sensación de paz,  la paz mental  que estas en el lugar correcto,  que vuelves hacer tú,  “que lo lograste ya que todos están en la cama” que gracias a las enseñanzas  y exigencias de mi padre, "asumir que todo acto tiene consecuencia, por ende, cualquier decisión que tome debo tener la responsabilidad de llevarla hasta el final".

Hoy en día me doy cuenta que nada es casualidad, que todo tiene un destino, que esos 6 años que pensé que fueron un gran desperdicio y fracaso en mi vida, ya que te dices que el tiempo que pasa no vuelve, me dieron una gran lección, aprendí  de que cada vez que el camino se haga más cuesta arriba debes escuchar tu corazón y sí eres de las personas que te inventas un nuevo escalón, para poder seguir subiendo, adelante, no cortes tu vuelo, no cortes tus alas, que la recompensa es grande!!!

Sé que el camino aún es largooo, pero la cruz se hace tan liviana, cuando haces parte de ti el camino, sin miedo de enfrentar los obstáculos. Una vez le escribí un mensaje a mi hermano, diciéndole  cuanto lo admiraba mi hijo, por sus grandes aventuras y mi hermano me respondió, dile que más aventurero que él, son sus padres… Mira que cierto!!!…Otra día, recibí un mensaje de una prima, diciéndome lo bien que me había caído Canadá y le respondí; “Es que me siento como pez en el agua” no sé, si sonare  a mala gradecida con mi patria, pero el sentimiento que tengo con este País, es  que lo siento tan mío, que ahora  es mi nueva patria, mi nuevo país, que lo siento tan mío como si hubiera nacido aquí. Y lo que más me encanta, que cada día, tengo la oportunidad de conocer a más gente, que me ayudan a crecer, tanto en lo  personal, como espiritual, y hacer cada uno de mis días mejor. J